Prof. Dr. Carlos A. Nuñez1
RESUMEN
La presencia de cuerpos extraños en el tracto intestinal de perros y gatos constituye una de las urgencias más habituales en medicina veterinaria de pequeños animales. La variedad de objetos ingeridos, su ubicación y el grado de obstrucción que provocan determinan la conducta médica a seguir. Mientras algunos cuerpos extraños permiten el tránsito intestinal sin comprometer gravemente la función digestiva, otros generan una obstrucción parcial o completa que puede evolucionar hacia cuadros de necrosis, perforación o peritonitis. En ese escenario, la ecografía abdominal ha demostrado ser una herramienta clave para guiar decisiones clínicas. No solo permite identificar materiales no radiopacos, sino que también ofrece información dinámica y detallada del estado funcional y estructural del intestino. Este trabajo propone una revisión integral de la fisiopatología, el abordaje diagnóstico y terapéutico de los cuerpos extraños entéricos, acompañada de casos clínicos representativos, y subraya el rol decisivo de la ultrasonografía en la práctica diaria del veterinario.
Palabras claves: cuerpo extraño, obstrucción entérica, vómito, ecografía abdominal, ultrasonido, señal de STOP, perro, gato, veterinaria.
SUMMARY
The presence of foreign bodies in the gastrointestinal tract of dogs and cats is one of the most common emergencies in small animal veterinary medicine. The type of object ingested, its location, and the degree of obstruction it causes all determine the appropriate medical approach. While some foreign bodies allow intestinal transit without significantly compromising digestive function, others lead to partial or complete obstruction, which may progress to necrosis, perforation, or peritonitis. In such scenarios, abdominal ultrasonography has proven to be a key tool in guiding clinical decisions. It not only enables the identification of non-radiopaque materials but also provides dynamic and detailed information about the functional and structural status of the intestines. This paper offers a comprehensive review of the pathophysiology, diagnostic strategies, and therapeutic approaches for enteric foreign bodies, supported by representative clinical cases, and highlights the critical role of ultrasonography in the veterinarian’s daily practice.
INTRODUCCIÓN
En la práctica cotidiana, no es extraño que perros y gatos ingresen a consulta tras haber ingerido objetos ajenos a su dieta habitual. Aunque muchos de estos cuerpos extraños logran atravesar el tubo digestivo sin generar consecuencias, algunos pueden comprometer seriamente la salud del paciente, desencadenando desde un cuadro obstructivo hasta una emergencia quirúrgica. Ante esta situación, la evaluación clínica por sí sola muchas veces no basta. La necesidad de herramientas diagnósticas confiables, sensibles y accesibles se vuelve imperiosa. En este sentido, la ecografía abdominal se ha consolidado como una técnica de elección. Su capacidad para visualizar en tiempo real la estructura y función del intestino, junto con su utilidad para detectar materiales no radiopacos, la convierten en un recurso invaluable a la hora de decidir si un cuerpo extraño puede ser manejado médicamente o requiere resolución quirúrgica. Comprender cómo integrar esta herramienta en la toma de decisiones es esencial para una práctica clínica más segura, eficaz y basada en evidencia.
MARCO TEÓRICO
CLASIFICACIÓN Y LOCALIZACIÓN
Los cuerpos extraños entéricos pueden clasificarse en función de su forma (lineales, rígidos, blandos), su localización (duodeno, yeyuno, íleon, colon) y su comportamiento clínico (obstructivo o no obstructivo). Esta última distinción es crítica, ya que condiciona el pronóstico y determina el abordaje terapéutico (Burkitt et al., 2018).
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Tabla 1 – Clasificación de los cuerpos extraños entéricos según tres diferentes criterios
Naturaleza: lineales (hilos, cuerdas), rígidos (huesos, juguetes, piedras), blandos (ropa, espumas).
Localización: duodeno, yeyuno, íleon o colon.
Comportamiento: obstructivo vs. no obstructivo.
CUERPOS EXTRAÑOS NO OBSTRUCTIVOS
Estos objetos permiten el paso del contenido intestinal o incluso transitan espontáneamente. Generalmente son pequeños, de material flexible o parcialmente degradable, y se localizan en zonas distales del intestino. Clínicamente, se presentan con signos vagos como letargia, vómitos aislados o inapetencia. Suelen ser detectados incidentalmente en estudios de imagen realizados por otros motivos.
Tabla 2 – Características comunes de los cuerpos extraños entéricos no obstructivos |
Tamaño pequeño en relación con el lumen intestinal. |
Material flexible o fragmentable. |
Ubicación distal (colon o recto). |
Signos clínicos leves (vómitos ocasionales, anorexia parcial, letargia) o inexistentes. |
Manejo: El enfoque terapéutico es conservador: ayuno, fluidoterapia, monitoreo ecográfico y radiográfico, y vigilancia del estado clínico. Según estudios recientes, entre un 40 y un 60% de los cuerpos extraños ingeridos pueden eliminarse sin intervención quirúrgica (Hall et al., 2019).
CUERPOS EXTRAÑOS OBSTRUCTIVOS
A diferencia de los anteriores, estos generan una interrupción parcial o total del tránsito intestinal, lo cual puede progresar rápidamente a necrosis, ruptura y peritonitis. Los signos clínicos típicos incluyen vómitos persistentes, distensión abdominal, dolor evidente, ausencia de deposiciones y deshidratación progresiva. Su evolución puede ser rápida y dramática, lo que exige un diagnóstico preciso y una intervención oportuna (Nelson & Couto, 2020).
Tabla 3 – Signos clínicos relevantes de los cuerpos extraños entéricos obstructivos |
Vómitos persistentes o incoercibles. |
Dolor abdominal severo. |
Distensión abdominal. |
Deshidratación progresiva. |
Ausencia de deposiciones o tenesmo sin evacuación. |
CONSIDERACIONES ESPECIALES: CUERPOS EXTRAÑOS LINEALES
Este tipo de cuerpo extraño es más frecuente en gatos y representa una situación de alto riesgo. Los hilos o cuerdas suelen engancharse en la base de la lengua o el píloro, generando un efecto de «plegamiento» intestinal con múltiples puntos de tracción. Esto produce laceraciones, isquemia y perforaciones. La cirugía es generalmente inevitable, y debe realizarse con sumo cuidado para evitar daño adicional (Foster, 2018).
DIAGNÓSTICO
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Radiografía abdominal: Útil cuando el objeto es radiopaco o cuando existen signos indirectos como dilatación de asas intestinales y niveles hidroaéreos.
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Ecografía abdominal: Superior en la detección de materiales no radiopacos y en la evaluación funcional. Permite observar dilataciones, líquido libre, motilidad intestinal, engrosamiento parietal y contenido anómalo (Nyland & Mattoon, 2015).
La SEÑAL DE STOP obtenida mediante el estudio ultrasonográfico resulta esencial para detectar y reconocer la obstrucción entérica (Nuñez, 2019).
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Doppler color: Puede complementar la evaluación al mostrar alteraciones en el flujo intestinal o signos de compromiso vascular.
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Exploración laparoscópica o laparotomía exploratoria: En casos dudosos o no resueltos. En casos con hallazgos dudosos, la laparotomía exploratoria puede ser necesaria, especialmente cuando el deterioro clínico progresa pese al manejo conservador.
Manejo quirúrgico: Enterotomía (extracción del objeto), enterectomía (en casos de necrosis), o anastomosis intestinal. La decisión depende del grado de compromiso vascular del segmento intestinal involucrado.
ECOGRAFÍA ENTÉRICA NORMAL EN PERROS Y GATOS
La evaluación ecográfica del tracto gastrointestinal en pequeños animales es una herramienta diagnóstica no invasiva, accesible y altamente sensible, especialmente útil para detectar alteraciones morfofuncionales asociadas a enfermedades entéricas. Para interpretar correctamente los hallazgos patológicos, es fundamental conocer primero las características ecográficas del tracto digestivo normal, tanto en perros como en gatos.
Características generales
En condiciones normales, el intestino de perros y gatos presenta una estructura tubular compuesta por cuatro capas concéntricas, visibles en cortes transversales y longitudinales, que representan las diferentes capas histológicas (figs. 1 y 2). Estas capas, de aspecto alternante hipo/anecoico e hiperecoico, son:
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Mucosa: hipo/anecoica.
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Submucosa: hiperecoica, bien definida.
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Muscular: hipo/anecoica.
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Serosa: hiperecoica, delgada y lineal.
Estas capas deben tener una distribución uniforme, contornos regulares y sin pérdida de diferenciación, siendo uno de los principales indicadores de integridad intestinal (Penninck & d’Anjou, 2015 – Nuñez 2019).
A estas cuatro capas o estratos se les agrega una quinta línea hiperecoica: una delgada interfase que aparece recubriendo la superficie de la mucosa.
FIGURA 1, Corte transversal (y zoom) de un segmento del duodeno. En la imagen de la derecha se ha agregado el nombre de cada estrato.
FIGURA 2. Corte longitudinal (y zoom) de un segmento del yeyuno. En la imagen de la derecha se ha agregado el nombre de cada estrato.
Grosor normal de la pared intestinal
El grosor de la pared intestinal varía dependiendo del segmento evaluado y de la especie:
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Duodeno: Hasta 5 mm en perros, hasta 3 mm en gatos.
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Yeyuno/íleon: 3–4 mm en perros, 2–3 mm en gatos.
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Colon: Más delgado, debido a su habitual distensión, generalmente <2 mm en ambas especies.
(Nyland & Mattoon, 2015; Penninck & d’Anjou, 2015)
La medición debe realizarse en estado de ayuno, ya que el contenido digestivo puede modificar la presentación ecográfica y dificultar la delimitación de capas.
Motilidad
En animales sanos, la motilidad intestinal debe ser visible, con contracciones peristálticas regulares (aproximadamente 3 a 5 contracciones por minuto). Una motilidad disminuida o exagerada puede ser indicio de procesos patológicos como íleo paralítico, gastroenteritis o cuerpo extraño (Gaschen, 2011).
Contenido luminal
Normalmente, el lumen del intestino puede encontrarse sin contenido (fig. 3), o contener material ecogénico finamente granular (denominado “mucoide”) (fig. 4), una pequeña cantidad de fluido anecoico (fig. 5) o gas (fig. 6). El gas puede generar artefactos reverberantes, pero no debe impedir la evaluación de la pared. Presencias anormales incluyen contenido hiperecoico heterogéneo o estructuras que provocan sombra acústica, que podrían sugerir un cuerpo extraño si se encuentran en el intestino delgado.
FIGURA 3. Intestino vacío. FIGURA 4. Intestino delgado con contenido mucoide.
FIGURA 5. Segmento entérico en corte transversal, con líquido en lumen.
FIGURA 6. Duodeno descendente con gas en su lumen. Nótese el artefacto de reverberancia presente.
En más del 90% de los pacientes el colon presentará un contenido hiperecoico con reverberancia proximal y sombra acústica hacia la región distal, debido a la presencia de heces densas entremezcladas con gas (fig. 7 A y B y fig. 8). Resulta fundamental no confundir este contenido normal para el colon con la presencia de cuerpos extraños.
En ocasiones poco frecuentes el paciente presentará el colon sin contenido (fig. 9), en cuyo caso se observará la pared colónica gruesa y con pliegues, siendo esto completamente normal.
FIGURA 7. Imágenes ultrasonográficas del colon de dos pacientes diferentes, con el típico contenido luminal.
FIGURA 8. Corte transversal del colon a nivel del hipogastrio del paciente, con su típico contenido hiperecoico con reverberancia proximal / sombra acústica distal.
FIGURA 9. Colon del paciente sin contenido luminal.
FIGURA 10. Colon con escaso contenido líquido en su lumen.
Por último, cabe destacar la importancia de reconocer la válvula iloecólica, puesto que esta estructura marca el límite entre el intestino delgado y grueso, y se debe recordar que una misma imagen, es decir, una misma estructura, puede ser interpretada de diferente manera según se ubique en el intestino delgado o grueso.
FIGURA 11. Imagen ultrasonográfica de la papila ileal en un paciente felino. En los gatos esta estructura es prominente, muy notoria, y moderadamente sencilla de encontrarse y reconocerse.
FIGURA 12. Corte ultrasonográfico incluyendo al colon, la papila ileal y al ciego. Nuevamente se trata de un paciente felino. Recordar que en loa gatos la unión del íleon al intestino grueso es de manera perpendicular, casi con un ángulo de 90°.
FIGURA 13. Zona de unión del íleon al colon, esta vez en un paciente canino. Nótese que en esta especie el íleon y el colon se encuentran alineados en un mismo plano.
Ecogenicidad y simetría
La simetría en el grosor, la diferenciación clara de las capas y la presencia de motilidad activa son signos fundamentales de normalidad. La pérdida de estratificación, el engrosamiento focal o segmentario y la presencia de líquido peritoneal deben ser considerados como hallazgos anómalos.
La ecografía entérica proporciona una visión detallada del intestino delgado y grueso en perros y gatos, permitiendo distinguir entre condiciones normales y patológicas (figs. 14-17). El conocimiento de la anatomía ecográfica básica es esencial para interpretar con precisión los signos de enfermedades como enteritis, neoplasias, intususcepción o la presencia de cuerpos extraños. En manos entrenadas, esta técnica representa una extensión indispensable del examen físico veterinario.
FIGURA 14. Enteritis en un paciente felino. Nótese el marcado engrosamiento del estrato muscular y el ligero aumento difuso de la ecogenicidad de la mucosa.
FIGURA 15. Mucosa entérica de ecogenicidad difusamente incrementada, lo cual suele ser visualizado en los procesos inflamatorios crónicos.
FIGURA 16. Reducción transmural de la estratificación entérica. Esta es otra presentación de las enteritis crónicas.
FIGURA 17. 4 Corte longitudinal (imagen izquierda) y transversal (imagen derecha) de un sector del intestino delgado. Este es otro ejemplo de pérdida transmural de la estratificación, asociado a engrosamiento marcado de la pared. En este paciente fue debido a un linfoma entérico.
ALGORITMO DE DECISIÓN MÉDICO-QUIRÚRGICO
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Asintomático + objeto pequeño + sin signos obstructivos → observación y seguimiento clínico e imagenológico.
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Signos gastrointestinales leves + cuerpo extraño visible sin signos obstructivos → tratamiento médico y reevaluación.
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Signos graves + obstrucción radiológica/ecográfica + empeoramiento clínico o sospecha de perforación → cirugía inmediata.
Veterinario, UBA. Especialista en Ultrasonografía Diagnóstica en Pequeños Animales, UBA. Ultrasonografista Certificado, CPMV CABA. Profesor universitario y de posgrados. Director de diplomaturas y otros posgrados. Autor de libros, capítulos de libros y artículos científicos. Práctica profesional privada, Argentina y México.
mail: Carlos_an1977@hotmail.com